Sabemos que la pandemia del Covid-19, ha traído un sinfín de problemas a nivel global. Es muy cierto que nadie estaba preparado, ni avisado, sobre lo que iba a suceder en el pasado, presente, y futuro, pues vino a cambiar completamente las necesidades y el comportamiento de nosotras las personas. Pasamos casi un año sin una respuesta certera sobre el virus, al que ahora todos le tenemos respeto. La noticia de la vacuna contra el COVID-19 fue un milagro para el mundo entero. El desarrollo y estudio detallado que se realizó para poder tener el catálogo de estas vacunas, fue algo que no se hacía en años, incluso décadas. Fue la mejor noticia para el ser humano. Con muchas esperanzas se pensaba volver a la normalidad mucho antes de lo que realmente ha sido hasta hoy en día. Sí, desafortunadamente aún falta demasiado, incluso muchos estudios detallan que nunca se volverá a los tiempos de antes. El COVID-19 fue algo que NOS CAMBIÓ LA VIDA A TODOS. Nunca habrá vuelta atrás, esta es la nueva normalidad. Ahora, hablando más a fondo de las vacunas, la CORRUPCIÓN también llego a ellas. Todos estamos conscientes de que los programas de vacunación están llenos de desinformación, desigualdad, confusión y caos. Nunca hubo transparencia en este tema, y más que un derecho, es un privilegio o lujo estar vacunado. El lucrar con ellas es algo demasiado sonado, no solo en un mercado negro, sino en todos los gobiernos. Solo el 6% de los contratos sobre la vacunas estaban disponibles públicamente, y no era claro su contenido. ”Una investigación de Public Citizen reveló cómo Pfizer, junto con Moderna, se ha convertido en una de las vacunas COVID-19 más deseables, utilizó su creciente poder en las negociaciones con los gobiernos” - Transparencia Internacional. La desigualdad y el abuso de poder, también está presente en la vacunación. Las poblaciones vulnerables que no poseen el dinero necesario para la negociación son las más afectadas. Éstas han llegado a depender de otros acto
res que desafortunadamente están aliados con la corrupción.
Además de la falsificación y el mercado negro, surgió la “Vacunación VIP” y no cualquiera podía ser parte de su lista. Esta fue la forma en la que funcionarios, políticos y personalidades obtuvieron la vacuna antes que todos, sin respetar el esquema de vacunación propuesto para la población mexicana. Así como el lucro, surgieron las falsificaciones, en donde las personas eran vacunadas con dosis ficticias de las que se presumían que eran “Pfizer”. Asimismo, se habló sobre un embarque de vacunas que arribaron a México, de tipo “Sputnik-V”, del cual el gobierno ruso desmintió la procedencia y se abrió una carpeta de investigación de la que no se ha hablado certeramente hasta el momento.
Está muy claro que la corrupción está presente en todos lados. El Covid-19 fue la perfecta excusa para que se siguiera desarrollando y atacando a fondo. Por supuesto, los ciudadanos hemos sido partícipes de esto, pues claro deseamos ser lo menos vulnerables a esta pandemia. Los problemas continúan y con esto los contagios del virus. En lo que todos los ciudadanos debemos de estar de acuerdo, es en qué lo que no debe de seguir, es la corrupción. Es nuestra responsabilidad y obligación aportar en forma positiva a esta pandemia que está ya bastante plagada de malas noticias.
¡Comprometámonos por un MEJOR MÉXICO y acabemos con la corrupción!